domingo, 22 de septiembre de 2013

Inserción de las TIC en los espacios pedagógicos

En la sociedad actual, tanto en Venezuela como a nivel mundial, la inserción y uso de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en los espacios pedagógicos, han alcanzado rápidos cambios que implican nuevos planteamientos para la formación de los docentes,  a través del uso de éstas, se evidencia que su aplicabilidad proporciona mejores construcciones de instrumentos para atender las actividades diarias que realizan los docentes en cualquier nivel educativo.
Las universidades, en general, tienen la necesidad y responsabilidad de repensar los procesos que desde ellas se gestan en función de configurar contextos educacionales diversificados. Para ello, se requiere de un pensamiento inclusivo, capaz de interpretar la realidad compleja e intervenir en esta, de manera consciente, tal como lo plantea Bartolomé, A. (2001).
            Cuando se habla de modelos pedagógicos, se refiere a las nuevas tendencias y paradigmas que generan las economías totalitarias y las nuevas tecnologías de la información y de comunicación. No se niega que representan retos que deben reflexionar y asumir las universidades como parte de los procesos de generación y transformación del conocimiento y la realidad. No obstante, se sabe que no es la tecnología en sí misma la que genera y transforma la práctica educativa.

En este sentido, no sólo demandan una actitud de flexibilidad y apertura a las nuevas tendencias de educación virtual y tecnológica, sino también requieren de una sólida formación para que, verdaderamente, las TIC lleguen a incidir en la construcción de modelos pedagógicos renovadores.

Es innegable el papel que corresponde a la universidad de investigar y reflexionar con respecto a los usos y la función y efectos que pueden tener los paradigmas virtuales y tecnológicos en los procesos de enseñanza y aprendizaje. A tal efecto Castillo, L. (2008), afirma “Redefinir su función y las estrategias logra no sólo la interactividad entre el conocimiento y el aprendizaje”. (p.123), sino niveles de proactividad y afectividad entre las personas, tal como lo plantea Cabero, J. (2003).
Con el uso de las TIC en la educación se puede lograr despertar el interés en los estudiantes y profesores por la investigación científica; así lo afirma Castells, M. (2001). Así como posibilitar el mejoramiento de las habilidades creativas, la imaginación, habilidades comunicativas y colaborativas pudiendo acceder a mayor cantidad de información y proporcionando los medios para un mejor desarrollo integral de los individuos, tal como lo plantea Bettetine, G. (2007).

En mi opinión estoy de acuerdo con lo planteado por los autores anteriores; ya que todo esto es posible a través de la práctica pedagógica, porque es el elemento decisivo para hacer de los nuevos modelos y del uso de las nuevas tecnologías propuestas innovadoras para el aprendizaje, innovaciones educativas además de tecnológicas.

Así, el reto de la educación virtual, parece ser la forma de disponer un espacio educativo apoyado en lo tecnológico, para favorecer no la simple reproducción o adquisición de los saberes sino, por el contrario, las posibilidades de nuevas composiciones y creaciones a partir de las actuales condiciones del saber.

Los estudiantes de esta sociedad del siglo XXI tienen que moverse en un entorno rico en información, tienen que desarrollar dos nuevas competencias, adicionales a la clásica de conocer, hacer y ser, deben aprender a buscar la información y a saber aplicar o transformar esa información en la solución de problemas y en la generación de nuevos conocimientos.

En relación a la formación del personal docente debe ser una política continua y esencial para las instituciones universitarias, interactuando el uso y la integración de las TIC y facilitando los medios tecnológicos y un buen asesoramiento.


En tal sentido, la formación docente deberá atender al desarrollo de destrezas y habilidades no solo instrumentales en torno a las TIC, sino también a la formación de criterios para la de-construcción y re-construcción de los referentes y significados de las informaciones y saberes que circulan a través de las TIC. Tal situación refleja la emergencia de un cambio en los roles pedagógicos tanto del docente como de los estudiantes. El docente será más facilitador, propiciará las condiciones para el aprendizaje y el estudiante será más autónomo y responsable de su aprendizaje.